Hola, tropa! Como algunos de vosotros ya sabéis, la semana que viene Isabel y yo nos embarcamos en un viaje que, en teoría, debería llevarnos hasta Praga, pasando por la Provenza, Chamonix, Montreux, Zermatt, lago de Como, Stelvio, los Dolomitas, Innsbruck, Mauthausen, Munich, la Selva Negra y Millau. Partiremos sin preocuparnos de las reservas, y dejando algo abierta la fecha de regreso, esperamos que sean unos 10 dias.
Como siempre, apagaremos los teléfonos móviles y nos mantendremos alejados de Internet, por lo que no os molestaremos hasta la vuelta jejeje 😉 😉 😉
He hecho una especie de "prólogo" del viaje en mi blog, por si queréis echarle un vistazo:
http://hoysalgoenmoto.blogspot.com.es/2012/06/eurotour-de-nuevo-todo-empieza-de-nuevo.html
A la vuelta, os prometemos un ladrillo de cronicazo, servido en cómodos fascículos porque me temo que no me va a caber todo el rollo en cuatro frases
Saludos y buena ruta, amigos! v´sss
Buen Viaje¡¡ 8) 8)
v´sss
A pasarlo bien... hay que disfrutar de la vida... 8)
Brindad por nosotros desde la distancia :salud: , y a disfrutar.
Que tengais un buen viaje y disfruteis a tope 😉 esperamos ese pedazo de cronicon......... 😯 😯 😯
Os deseo mucha suerte en el viaje.
Saludos desde CT.
He intentado publicar en tu blog pero me ha resultado imposible.
Enhorabuena por ese pedazo de viaje, suerte y buenísima ruta y una buena faja y mucho ánimo para Isabel. Un abrazo a ambos y hasta la vuelta que te leeremos con envidia sana.
Muchas gracias a todos! Abrazos a repartir, y hasta la vuelta 😉
Que lo paseis muy bien y nos traigais nuevas experiencias
Pentax!!! pasaoslo muy bien!!!
Los mejores deseos para los dos. Disfrutar a tope. Os esperamos.
Pasarlo bien! Esperamos con impaciencia esa pedazo de cronica!!
Espero que tengaís un buen viaje y que sea para ambos inolvidable.
2salu2 (uno para cada uno), jejeje
Mandadnos alguna postal... 😉
Uves y ráfagas
Eurotour (1): TENGO UNA PROVENZA PARA USTED
La moto está cargada hasta los topes, perfectamente revisada y engrasada; durante el año hace muchos viajes, pero esta vez toca “el” viaje, el grande, el que se sale de las fronteras estatales buscando destinos lejanos…
El planteamiento sobre el mapa era liarla bien gorda y llegar hasta Praga vía Alpes, pero casi de inmediato nos dimos cuenta que, con los días disponibles, sería un suicidio cumplir con el itinerario. Me pasé con los kilómetros por etapa, y de haber continuado con el plan original, los días habrían sido un eterno maratón de moto con paradas mínimas. Además, es el primer viaje “serio” de Isabel, que por cierto lo inicia con una severa contractura en la espalda… Así que, sin ningún tipo de trauma ni remordimiento, reorganizamos la ruta con el objetivo de disfrutar al máximo de los destinos, sin prisas y sin madrugones, dando la vuelta cuando fuera conveniente. Pese a todo, llegamos hasta los Alpes suizos, que no es moco de pavo. Ésta es la historia…
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La primera etapa es mayoritariamente un rutinario enlace de autopista, que nos sirve para irnos acomodando a la moto y a sus inercias, ya que en esta ocasión la llevamos cargada hasta la baca.
Salimos de España por la Jonquera. En las autopistas de Francia volvemos a encontrarnos con un funcionamiento social envidiable: 130 kilómetros por hora de velocidad máxima (masivamente respetados), vehículos circulando por ese carril derecho que aquí nos empeñamos en no ver, y unos peajes con tarifas específicas para las motos, a un precio ventajoso…
Primer repostaje en Francia. La gasolina, sensiblemente más cara que aquí. El área de servicio es amplia, limpia y con una generosa zona de sombras, aprovechamos para buscar un rincón medianamente discreto, y extendemos la “manta píc-nic” que hemos traído con nosotros, y que nos será tremendamente útil durante el resto del viaje: ya es pieza imprescindible de nuestro equipaje. Nos comemos unos bocadillos, y holgazaneamos tumbados a la sombra: el sol nos está atizando de lo lindo, hoy hace un calor que funde los plomos.
En Avignon dejamos por fin la autopista. Estamos entrando en los dominios de la Provenza, tierra de lavanda y de vinos. Vemos muchas viñas, pero de momento ni rastro de lavandas. Isabel se empieza a mosquear, amenaza con llevar a “esos borrachos timadores” a los tribunales si no empieza a ver matas violetas por doquier… Consultamos nuestro “dossier” de ruta, nos prometen lavanda a espuertas en dirección este, más allá del Mont Ventoux. O sea, que hasta mañana, nada.
Por vez primera, vemos el río Ródano. El lecho a su paso por Avignon es impresionante, casi consigue empequeñecer a nuestro Ebro. Coincidiremos varias veces con él durante el viaje.
El viento nos empieza a zarandear de lo lindo; ya estábamos informados de que en esta zona es frecuente la visita del Mistral, un viento seco y muy violento que ha registrado rachas de más de 300 kilómetros por hora en la cima del Mont Ventoux, que ya se recorta inconfundible en el horizonte. Mañana intentaremos coronarlo, si la meteorología lo permite…
Nuestro destino hoy es la villa de Vaison-la-Romaine, lugar con un rico patrimonio medieval, y que además tiene el yacimiento arqueológico más grande de Francia. Nos acomodamos en un hotel en las afueras, tiene piscina y en diez minutos ya estamos chapoteando para bajar el termostato corporal.
Más tarde, mudados y refrescados, bajamos a la villa. Está construída alrededor de una colina; en lo más alto hay un castillo, accesible por un camino algo abrupto. Más abajo, su cuidado casco histórico, y aún más abajo, en el valle, está la parte “nueva”.
Referente a la comunicación, de momento nos vamos defendiendo con un vocabulario rudimentario, apoyado por ese lenguaje universal que es la mímica.
Isabel continúa contracturada y medicada, pero sólo quiere saber lo que visitaremos mañana; esta chica me está enseñando muchas cosas, y hoy me está dando una lección de coraje y valentía. Caemos en la cama como dos piedras, el primer día ha salido redondo.