El Gorila
Era domingo, y el zoológico estaba lleno de visitantes.
Todos querian ver la nueva adquisicion del parque,
un enorme gorila traido -decia el folleto explicativo:
-"de una remota región de Africa donde nunca el hombre
ha dejado huela".
Entre los que acudieron a contemplarlo se hallaba
un paralitico en su silla de ruedas. De pronto se produjo
una enorme conmoción:
el gorila se habia enfurecido, mostraba dientes y garras
en actitud de ataque y se daba tremendos golpes en el pecho.
La gente retrocedía asustada. El fiero animal empezo con sus
membrudos brazos a doblar los barrotes de su jaula.
Los rompió por fin, y salio de ella.
Espantada, la gente echó a correr por todas partes.
El pobre paralitico también se apresuraba en su silla de ruedas,
pero se iba quedando atrás, de la muchedumbre casi, al alcance del
gorila.
Un guardia que acudía vio los apuros del desdichado y empezó a gritar,
a fin de que la gente lo ayudara:
!El paralitico! !El paralitico!
El paralitico se voltea y le grita con gran rencor al guardia:
* Dejá que el gorila escoja! Hijueput*!
XD XD XD XD XD XD XD XD
MUY BUENO
jejejejejeje
jajaja, ¡muy bueno! 😀 😀
Muy bueno , nada mas le falto señalarle con el dedo. XD XD XD .